Había una vez una familia muy humilde. Constaba de un padre, una madre y una pequeña niña de 7 años llamada Amanda que siempre, absolutamente siempre, sonreía. Aunque a la vista de algún desconocido esta era simplemente una familia común y corriente, había algo que hacía a esta familia un tanto peculiar. Siempre estaban juntos y siempre estaban felices.
La casa en la que vivían era muy pequeña, constaba de una sola habitación que se…