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Por mi cuenta y desde abajo
Como triunfar en la vida sin la ayuda de nadie
¿A ustedes no les pasa que la gente siempre pretende demeritar sus logros? Yo llegué a donde estoy ahorita por mi cuenta, solito, empezando desde abajo, y es hora de que la gente lo vaya aceptando.
Como tuve beca completa en el Colegio San Patricio porque mi mamá era maestra ahí, desde que estaba chiquito me vi obligado a echarle un chorro de ganas a la escuela y salir adelante por mis propios méritos, para evitar regaños por malas calificaciones. (Siendo hijo de maestra, no se imaginan la presión y el estrés que sufrí entonces por las expectativas.) Y ni crean que me daban todo lo que quería por sacar buenas calificaciones: Si quería algún videojuego, yo tenía que poner la mitad de lo que costara (usando el poco dinero que mis papás me daban cada mes para comprar comida, aunque hubiera comida en casa como es obviamente debido) ¡Qué barbaridad! Además, como siempre tuvimos quién ayudara en la casa (cocinando, limpiando, etc.) ni siquiera gocé de esas casuales distracciones para alejarme tantito de la friega escolar. Tenía que echarle ganas a mis tareas y otras actividades de desarrollo personal como clases deportivas o catecismo, en vez de sólo preocuparme por “ser un niño y disfrutarlo”. Por si fuera poco, cuando mis papás tenían algún compromiso, siempre había algún tío o mis abuelitos para…
